Las características de Rudbeckia (Rudbeckia hirta y Rudbeckia fulgida)

Rudbeckia rígido

Las rudbeckias o rudbequias también se llaman margaritas amarillas, aunque otras plantas también se conocen con este nombre. Son plantas que pueden alcanzar de 20 cm a 2 m de altura, dependiendo de la especie y cultivar.

Las dos especies más cultivadas de rudbeckia son Rudbeckia hirta y Rudbeckia fulgida . La especie Rudbeckia hirta tiene varios cultivares disponibles para la plantación de jardines.

Las Rudbeckias tienen capullos que pueden tener aproximadamente 2 cm a 10 cm de diámetro, casi siempre con lígulas amarillas o anaranjadas, con algunas excepciones como el cultivar rojo ‘Cherry Brandy’.

Las Rudbeckias son plantas resistentes y, por lo tanto, son fáciles de cultivar en jardines, macetas o macetas grandes.

La rudbeckia más común en los jardines es la especie Rudbeckia hirta, que tiene varios cultivares. La especie Rudbeckia fulgida también se cultiva ampliamente. Hay más de 20 especies de rudbeckia, pero las otras se encuentran con menos frecuencia en cultivo.

Su origen es de América del Norte. Son plantas muy tolerantes a la temperatura, aunque solo crecen en los meses más calurosos del año. Durante el invierno, en regiones de clima frío, permanece inactivo.

Es mejor si se cultiva bajo la luz solar directa, pero se puede cultivar en sombra parcial con buena luz.

Lo ideal es mantener la tierra húmeda durante los primeros meses de crecimiento. Cuando está bien desarrollada, es una planta relativamente resistente a breves períodos de sequía.

El suelo debe estar bien drenado y ser moderadamente fértil. Estas plantas son muy tolerantes con el suelo, aunque crecen mejor en un suelo con un pH neutro o ligeramente alcalino.

Suele florecer en verano y otoño. Suelen ser plantas perennes. Algunas especies y cultivares son anuales o bienales.

Rudbeckia brilló

La propagación se realiza sembrando o dividiendo plantas bien desarrolladas durante el período de latencia. Las semillas se pueden sembrar en el lugar final o en semilleros, macetas y otros recipientes, y las plántulas se trasplantan cuando miden entre 5 y 10 cm de altura.

Siembre superficialmente en suelo húmedo, cubriendo las semillas como máximo con una fina capa de tierra tamizada, ya que las semillas necesitan luz para germinar. La germinación de la semilla suele tardar de 1 a 3 semanas.

El espaciamiento puede variar de 20 a 75 cm entre plantas, dependiendo de la altura del cultivar y dependiendo de si las plantas se cultivarán como anuales o perennes, utilizando un espaciamiento mayor en este último caso.

Deja un comentario